De la astrofísica a la ciberseguridad

Como marzo es el mes de la mujer, hemos querido que nuestra protagonista sea Susana Mejido. Una mujer terremoto, que saca tiempo para su hijo, para su trabajo, para la asociación donde colabora y para aportar valor a todo el equipo Cyber Strategy de Deloitte.
 

Para que el lector pueda conocerte y ubicarte dentro de la Firma, ¿nos podrías contar un poco tus comienzos profesionales y tu paso por la Firma?

Mi trayectoria profesional es un poco ecléctica: estudié Astrofísica, centrada en formación estelar, concretamente en unas características de las estrellas jóvenes. Al finalizar la carrera, hice un máster y terminé quedándome en la universidad investigando. Tras unos años, las becas se congelaron y comencé a pensar que necesitaba algo más solvente.

Y en ese momento llegaron unas iniciativas del Banco Santander, de consultoría para desarrollo software. La idea era formar a gente joven, y aunque no me consideraba programadora, sí había coqueteado con la programación durante mis años en investigación. Estuve tres años en el mundo desarrollo hasta que llegó de nuevo el momento de cambiar y comencé a escuchar hablar de la Ciberseguridad. Ya por aquel entonces, en desarrollo, este concepto sonaba bastante, por lo que fui introduciéndome en ese mundillo desconocido para mí. Desde entonces, ya he pasado seis años en ciberseguridad y en Deloitte desde 2019. Tenemos mucho camino por delante en este ámbito, mucho que trabajar, mucho que hacer.

¿En qué consiste tu trabajo actualmente y cómo se vincula con lo que buscas dentro de la Firma?

Actualmente pertenezco al equipo CSTA, dentro de Risk Advisory, en la práctica de Ciberseguridad. Uno de nuestros principales proyectos son las valoraciones de madurez en ciberseguridad de los clientes. La ventaja que tienen estos proyectos es que hacemos de trigger para otros equipos dentro de Cyber. Esto es, que después de realizar los análisis de madurez, les hacemos a nuestros clientes recomendaciones de iniciativas que pueden ser oportunidades de negocio para otras líneas dentro del departamento. También realizamos estrategias de seguridad utilizando tanto el framework de Deloitte Cyber como otros marcos normativos internacionales como, por ejemplo, NIST, ISO 27001.

Cuando entré en Deloitte, hice un estudio previo de dónde me incorporaría, con qué equipo y qué cosas haría exactamente, por tanto, puedo decir que lo que hago me gusta y que era lo que quería hacer. Me gusta porque, de alguna manera, estamos poniendo nuestro granito de arena para hacer de nuestra sociedad una sociedad mejor. Cuando analizamos una empresa y les recomendamos que hagan mejoras en la seguridad de su organización, estamos educando a las personas de esa organización.

Sabemos que eres una mujer terremoto, que llevas varias cosas a la vez. ¿Nos cuentas en qué iniciativas participas dentro de la Firma y si tienes alguna fuera ?

En Deloitte, aún no he tenido ocasión de colaborar con otras áreas, pero dentro de Cyber sí que he estado en algunos grupos de trabajo. Por ejemplo, formé parte del equipazo que realizó el informe del “CISO Survey” de este año. Ha sido una gran experiencia  realizar el estudio con el equipo y los resultados que hemos obtenido han sido muy interesantes. A ello, se une también mi gusto por documentaciones de ese tipo, con análisis, catalogaciones… Creo que es muy interesante y, además, soy muy fan de etiquetar, catalogar y clasificar cosas.

Entonces en tu casa también lo tienes todo así etiquetado, abres el armario tarrito con etiqueta, otro tarrito con etiqueta…

 Eso igual no, pero el calendario ya te digo yo que está lleno de colores, que es el buen truco de la planificación. De hecho, en el programa buddy, dedico un rato a explicarles la “organización del correo”, “etiquetado del calendario”, pero remarcando que mi forma de organizar mi correo me sirve a mí, ellos pueden coger lo que les guste, desechar lo que no y buscar nuevas ideas que les sirvan. Toda esta organización me llegó de la mano de mi primera jefa, mi mentora. De ella aprendí que es muy importante tener estas cosas muy organizadas.
 

Susana, que nos desviamos de la pregunta… ¿Iniciativas fuera de Deloitte?

Cierto. A ver, ahora mismo estoy participando en “Conoce mi proyecto”.Esto viene porque antes de la pandemia daba clases en una asociación. En ella, conseguí mucha fidelización por parte de los chicos, llegando a tener una clase de 16 chavales. Como las clases presenciales se han quedado en stand by con la llegada de la pandemia, estamos aprovechando el programa “Conoce mi proyecto” para poder ayudar a esta asociación a retomar de nuevo esas clases en formato presencial. En esta ocasión, queremos trabajar la parte educativa, pero también la parte psicológica, ya que la asociación está enfocada a niños con altas capacidades. El sistema educativo no está muy centrado en ellos y necesitan mucha ayuda y mucha dedicación.

También he estado un par de años dando clases en el máster de ciberseguridad del IE. Pero con la pandemia es otra de las cosas que no se han retomado.

Además de las iniciativas que nos has contado, ¿cómo concilias tu vida personal con la laboral? ¿Estás satisfecha con lo que has conseguido hasta ahora?

Conciliar… ¡esa gran mentira! Lo siento, pero es así. Conforme avanzan los años, en el trabajo vas teniendo compañeros más jóvenes, y eso hace que veas la diferencia de enfoque que van teniendo. Esos compañeros más jóvenes, cada vez tienen más claro que aparte del trabajo, hay vida.

Para poder conciliar es muy importante tener bien separadas la vida laboral y la personal. Intentar que no se mezclen en la medida de lo posible. Por ejemplo, los problemas del trabajo no trasladarlos a tu hogar, y cuando estés pasando tiempo con tu familia, que sea tiempo de calidad. Tengo un bebé de 11 meses y cuando estoy con él, como a diario me ve muy poquito, como mi marido, ese ratito estoy al 100% centrada en ellos. Pero esto no es posible si tu ambiente en el trabajo no es el adecuado, si no has construido una relación de confianza y transparencia con tus jefes y tu propio equipo. De hecho, contestando a tu pregunta de si estoy satisfecha con lo que he conseguido, te diría que sí, porque en mi equipo reinan la amabilidad, la empatía y la profesionalidad. Tres cualidades que me permiten poder conciliar ambas vidas. Y hay una cosa muy clara, que una persona trabajará mucho mejor cuando es feliz, y ser feliz es poder dedicarles tiempo a tus hobbies, a tu familia y a ti mismo.

Esas tres características anteriores, [la amabilidad, la empatía y la profesionalidad], son clave para la conciliación y creo que en muchas organizaciones hay que empezar a cambiar la forma de pensar y entender las necesidades de los empleados. Esa es la realidad: o nos adaptamos a ella o el problema vendrá cuando nos toque contratar a generaciones cada vez más jóvenes.

Actualmente hay muchas iniciativas, y cada vez más, para impulsar la presencia de la mujer en el mundo ciberseguridad. En este contexto, ¿qué nuevos retos tienes? ¿Cómo los afrontas?

La respuesta clave es “role models”. Tanto niños como niñas en época de colegio tienen el mismo nivel de curiosidad por las ciencias. De hecho, las estadísticas muestran que las notas son las mismas. Pero cuando pasan al instituto, por algún motivo, esa curiosidad por la ciencia de las niñas se pierde. Por eso es importante tener role models que sean mujeres. Cuando daba clases en la asociación, creo que era importante que las chicas me viesen, es decir, una mujer dando clases, que también trabaja en una gran empresa en el ámbito de ciberseguridad y que hablaba de más compañeras mujeres.

He asistido a muchas charlas de distintas iniciativas y lo que veo es que en la publicidad que nos rodea, la imagen masculina predomina sobre la femenina. Por eso es importante que, poco a poco, se vayan incluyendo figuras o personajes femeninos en esta publicidad relacionada con el mundo tecnológico y de ciberseguridad. De ahí la necesidad de mostrar ejemplos: que las niñas desde el colegio vean figuras de mujeres que triunfan y participan en iniciativas con impacto internacional.

Poco a poco, vamos poniendo nuestra semilla en esta sociedad. Debemos ir trabajando en el cambio de enfoque, participando en iniciativas que promocionen role models y que estén orientadas a la visión de la mujer. Y todo lo que hagamos ahora será parte de los cambios del futuro. De ese cambio de la sociedad.

Con tus años en el mundo laboral, ¿cómo percibes el crecimiento de la mujer en el mundo ciberseguridad?

Los estudios publicados sí reflejan ese incremento de las mujeres en ciberseguridad, en el mundo tecnológico. Cada vez más a menudo se van viendo capas directivas con más mujeres., Eso es bueno y me lleva de nuevo al concepto “role model”. No obstante, todavía queda un margen de mejora . De hecho, hace poco UNICEF publicó un gráfico en sus redes sociales con el título: “países donde se ha alcanzado la paridad de género”, con una imagen en blanco con el siguiente mensaje: “ningún país del mundo ha alcanzado la paridad de género”. Pero tampoco debemos confundir igualdad con equidad, hablamos de igualdad de oportunidades, es decir, las mismas para mujeres y hombres.

¿Consideras que es importante fortalecer el empoderamiento de las mujeres en los mundos ciber?

Se nota mucho en función de las organizaciones. En aquellas donde la figura femenina todavía no es muy común, hay que trabajar este empoderamiento más a fondo. En ese tipo de organizaciones, cuando al encontrarme ante una sala llena de hombres, en muchas ocasiones, he tenido que recurrir a técnicas específicas para hacerme escuchar.

A las mujeres se nos condiciona por esa supuesta imagen de femineidad y cuando te enfrentas ante una sala llena de hombres, debes hacer algo atípico para captar su atención, para ir ganando el control de la situación. Es un poco triste que debamos siempre hacer un esfuerzo extra. La única forma de conseguir este empoderamiento es ampliar la diversidad en todas sus facetas, que la diversidad sea la normalidad.

Frecuentemente se perpetúa el estereotipo de que las niñas no son lo suficientemente capaces para desempeñar roles propios de los mundos tecnológicos o que los niños tienen mayor afinidad para ello. ¿Qué crees que se puede hacer para revertirlo?

Revertirlo es muy complicado, pero sí se pueden ir trabajando ciertas cosas que pueden ser más fáciles y que poco a poco irán teniendo mayor impacto. Desde pequeños, la diferencia que imponemos a los géneros se nota: en la ropa de bebé, en los juguetes de niño o niña, en los colores que se asocian a cada género… No obstante, una manera de revertir esto, siendo más directos es a través de esos role models femeninos de los que hemos estado hablando.

¿Cuál es la lección más importante que has aprendido en tu vida?

La importancia de las personas. Ya te hablé de mi antigua jefa, que para mí ha sido, y es, mi mentora, fue ella la que me enseñó la importancia de las personas: una empresa la forman personas, el trabajo lo hacen personas; debemos darles la importancia que se merecen. De forma complementaria, creo que ser amable es gratis. Si combinamos ambas cosas, personas con amabilidad, el resultado es impresionante.

Desarrollemos esto un poco: debemos saber dirigirnos a los demás, sobre todo porque, si dos personas están hablando es porque posiblemente una de las dos necesite algo de la otra. Con un poco de amabilidad nos aseguraremos el éxito en muchas ocasiones. Y esto mismo no solo hay que aplicarlo al mundo laboral, sino que hay que llevarlo a nuestro día a día, con el dependiente de la frutería, de la farmacia, del quiosco o el conductor del autobús.

¿Qué actividad te llena de alegría?

Pues aquí donde me ves soy una persona bastante difícil en ese aspecto, veo complicado que algo me complete de esa forma. Tengo muchos hobbies, pero no sé si existe algo más allá de la Astrofísica.

Pero con lo sonriente que eres, es muy difícil que te tomemos en serio cuando nos dices que nada te llena.

Soy una persona un poco difícil, muy introvertida y tímida, lo cual tiene su gracia porque mis compañeros se ríen cuando se lo digo. En mis momentos de descanso, me gusta estar en silencio y leer, porque para mí es un esfuerzo muy grande el hecho de tener que relacionarme de forma tan intensa con clientes, compañeros, etc. Sobrevivo gracias a que hablo mucho, y eso me ayuda a relacionarme mejor y dejar mi versión introvertida a un lado.

¿Cómo relativizas una situación negativa?

Reinventándome. La vida va sobre tomar decisiones, porque si tú no las tomas te conviertes en una especie de espectador de tu propia vida, donde otros tomarán esas decisiones por ti.

Y para cerrar esta entrevista, no puede faltar la pregunta más TOP. En todo concurso de Miss Universo se hace esta pregunta, y como para WiC hoy eres nuestra protagonista, te formulamos la pregunta: ¿cómo haces del universo un lugar mejor? Lo mismo te hace sentirte una “role model” por unos instantes.

¿Y si te respondo buscar el impacto positivo? [Risas] Para contestar a esta pregunta, me voy a basar en el libro “Cadena de favores”. Trata sobre un niño que ayuda a tres personas y lo que les pide a cambio es que ellas ayuden a su vez a otras tres. El mensaje de este libro es que, si tú tratas bien a la gente, puede existir una pequeña probabilidad de que la gente trate mejor a su vez a otras personas y, quizás un día, todo sea mucho mejor. Es la única forma, hay que ir poco a poco a mejor.