Externalización de la gestión integral de activos renovables

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Externalización de la gestión integral de activos renovables

Una opción para optimizar y mejorar la gestión de activos renovables

La externalización de activos renovables supone una oportunidad para generar eficiencias dentro de un sector con un horizonte de progreso y de desarrollo en los próximos años.

Tras la pandemia, la creación y puesta en marcha de plantas de energía renovable será una de las principales fuentes de progreso y desarrollo económico en los próximos años. La mayor parte de los fondos para la recuperación de Europa estarán dedicados a la transición ecológica y las energías bajas en carbono serán la punta de lanza para lograr ese objetivo. El sector privado en España tiene una oportunidad histórica.

Solo en el caso de España para 2021, el Gobierno destinará más de 6.800 millones de euros para el despliegue masivo del parque de generación de energías renovables. Esta inversión se mantendrá en el tiempo y representará un desafío para las compañìas, sus equipos y su plan de negocio.

Es por esto que es necesario contar con un plan claro, que se apoye tanto interna como externamente en la consecución de un objetivo. La externalización de la gestión de procesos en activos renovables despunta como una opción eficiente y modulable que ayuda a las empresas a crear valor y que permite aprovechar un impulso sin precedentes en la Unión Europea.

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Cinco etapas clave en los proyectos de activos renovables

Aunque el sector de las energías renovables tendrá un gran apoyo desde Europa y los gobiernos locales, los proyectos y la puesta en marcha de los mismos deben estar milimétricamente cuidados. Cada paso debe acompañarse de una rigurosa planificación y auditoría.

Desde Deloitte identificamos cinco etapas clave que atraviesan los proyectos de activos renovables y que, a través de un óptimo servicio de externalización, pueden generar ahorro y optimización.

1. Promoción, tramitación y diseño

Una adecuada gestión de los trámites de los terrenos donde se realizará una planta, los puntos de acceso y conexión para la energía, así como la selección de las compañías de ingeniería y diseño son puntos fundamentales en la consecución del primer gran objetivo, que es realizar un puente claro y seguro entre las administraciones públicas y las compañías de servicios de infraestructura.

2. Construcción y logística

Crear proyectos adecuados de licitación, rigurosos y con un calendario de hitos es determinante para alcanzar los plazos acordados y así aprovechar los diferentes estímulos para la creación de activos renovables. La gestión de seguros de cumplimiento y de actividad, así como la optimización de procesos, tienen un rol clave.

3. Operación y mercados 

El óptimo funcionamiento de los activos implica una dedicación muy exigente, es por esto que hay que apoyarse en la automatización, gestionar las comunicaciones con terceros y estar a la orden del día con los modelos de coberturas y de cotización del mercado.

4. Mantenimiento de activos 

Para un día a día con rendimientos asegurados, la planificación y el mantenimiento de las plantas son fundamentales. Para lograrlo hay que hacer un esfuerzo notable en la optimización del mantenimiento y en servicios predictivos.

5. Servicios corporativos

Cuando todo dentro de las plantas funciona correctamente, fuera de ellas la gestión corporativa también debe ser impecable. La buena administración de la contabilidad financiera, una analítica de costes correcta, la asistencia fiscal adecuada y una auditoría precisa son fundamentales para un óptimo funcionamiento integral.

Acelerar la transformación

Si algo está claro es que desde la administración pública hay una necesidad por acelerar la transformación del sector y virar hacia la energía renovable que no puede ser posible sin la infraestructura necesaria. Para esto, el Ejecutivo ya trabaja en un decreto ley para eliminar los cuellos de botella en la contratación y control de los proyectos de renovables.

Así lo explicó la secretaria de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Ana de la Cueva en el 18 encuentro de Energía, organizado por IESE y Deloitte. Y es que de los 140 mil millones de euros que recibirá España de los fondos de recuperación europeos, un 37% irán a financiar la transición ecológica.

Para estar listas, las empresas deben tener ventajas claras. Desde Deloitte hemos identificado siete de ellas que ganan valor si se trabajan desde un modelo de outsourcing especializado:

-        Soluciones contrastadas con referencias de implantación

-        Tecnología de última generación (IA, machine learning, analytics)

-        Metodologías de control y gestión

-        Variabilización y optimización de los costes de gestión

-        Cobertura de entornos end-to-end

-        Partners tecnológicos

-        Profesionales cualificados

Desde Deloitte estamos comprometidos en aportar valor en cada una de las etapas del negocio, haciendo que las soluciones de outsourcing sean a su vez un sinónimo de calidad. Nuestro compromiso es obtener resultados visibles y en ese sentido, en materia de activos renovables, la optimización y la mejora de procesos son un hecho consolidado.

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