Las prioridades de supervisión para 2022-2024 del Mecanismo Único de Supervisión del Banco Central Europeo (BCE)

El Mecanismo Único de Supervisión (MUS) del Banco Central Europeo (BCE) ha publicado las prioridades de supervisión de las entidades de crédito para el período 2022-2024. Estas prioridades responden a la triple finalidad siguiente:

1. Que las entidades de crédito salgan saneadas de la COVID-19
2. Que las entidades de crédito aborden las deficiencias estructurales mediante la digitalización y la mejora de la gobernanza
3. Que las entidades de crédito enfrenten los riesgos emergentes (incluidos los riesgos climáticos, los riesgos de crédito de contraparte, especialmente para las entidades financieras no bancarias, y los riesgos informáticos/cibernéticos)

Cada una de las prioridades está asociada a un conjunto de objetivos estratégicos y programas de trabajo de alto nivel subyacentes, que abordan las principales vulnerabilidades identificadas en los resultados de la evaluación anual del riesgo de las entidades de crédito bajo la supervisión del BCE.

Prioridad 1: Los bancos han de salir saneados de la pandemia (COVID-19)

1) Deficiencias en los marcos de gestión del riesgo de crédito
• Las entidades supervisadas han de mejorar sus prácticas de gestión del riesgo de crédito, especialmente en lo que respecta a la identificación de los prestatarios en dificultades, la valoración de las garantías y las prácticas de provisión.
• El MUS llevará a cabo revisiones en el ámbito de la identificación, el seguimiento y la evaluación del riesgo de crédito, así como la revisión de los métodos de dotación de provisiones de la NIIF 9.

2) Exposición de sectores vulnerables a la presión causada por el COVID-19, especialmente el sector inmobiliario comercial
• Los principales motivos de preocupación del BCE son la posibilidad de que se produzca un aumento de los impagos y de las pérdidas a medida que se retiren las ayudas públicas y las empresas vulnerables lleguen a sufrir un deterioro de la calidad de los activos. Así como los cambios estructurales en la demanda a los que se enfrenta el mercado de inmuebles comerciales.
• Los supervisores llevarán a cabo un seguimiento periódico de las exposiciones de los bancos frente a los sectores vulnerables, así como revisiones específicas e inspecciones in situ de las exposiciones de los bancos frente a los riesgos del mercado.

3) Exposiciones a la financiación apalancada
• La preocupación del BCE es que la búsqueda de rentabilidad, junto con el exceso de liquidez y medidas de apoyo masivas, han llevado a una relajación de las normas de crédito y, por tanto, a una mayor acumulación de riesgos.
• Los supervisores llevarán a cabo inspecciones in situ específicas para examinar las normas de suscripción, la gestión del riesgo de sindicación, la propensión al riesgo y los requisitos de capital.

4) Sensibilidad a las perturbaciones de los tipos de interés y los diferenciales de crédito
• El entorno generalizado de bajos tipos de interés suscita la preocupación de que los bancos no puedan hacer frente adecuadamente a la revalorización del mercado si los tipos de interés o los diferenciales de crédito a medio plazo sufren una perturbación.
• El MUS llevará a cabo revisiones específicas de la evaluación, el seguimiento y la gestión de los tipos de interés y los diferenciales de crédito de los bancos, tanto en las carteras de negociación como en las bancarias. A su vez, los Equipos Conjuntos de Supervisión llevarán a cabo el seguimiento de los planes de medidas correctoras de los bancos cuando se detecten deficiencias importantes.

Prioridad 2: Digitalización del sector bancario de la UE y mejora de la gobernanza

1) Deficiencias en las estrategias de transformación digital
• Los bancos han acelerado la adopción de tecnologías y se han adaptado a las preferencias de los clientes durante la pandemia, lo que ha permitido mantener el ritmo de desarrollo de las nuevas tecnologías en el sector, reducir las ineficiencias de costes en los bancos y los ha capacitado para competir con FinTechs y BigTechs.
• Los supervisores intensificarán sus esfuerzos para comparar y evaluar las estrategias de digitalización de los bancos, prestando especial atención a comprobar si los bancos han establecido acuerdos sólidos para la gobernanza, los recursos, las habilidades y la gestión de riesgos.

2) Deficiencias en las capacidades de dirección de los órganos de gestión
• Los supervisores han puesto de manifiesto en repetidas ocasiones las deficiencias en las funciones de control interno de los bancos, en el funcionamiento de los órganos de dirección, en la agregación de datos sobre riesgos y en las capacidades de información. Lo que conlleva que el BCE se cuestione la eficacia de los consejos de administración de los bancos y su capacidad de dirección estratégica.
• Los supervisores llevarán a cabo revisiones específicas e inspecciones in situ de la eficacia de los órganos de dirección de las entidades de crédito, y aplicarán la política del BCE sobre diversidad y un enfoque basado en el riesgo para las evaluaciones de idoneidad.

Prioridad 3: Hacer frente a los riesgos emergentes

1) Exposición a los riesgos climáticos y medioambientales
• Los bancos han de desarrollar una estrategia de mitigación para suavizar los impactos a largo plazo de los riesgos climáticos y medioambientales, que han de integrar en sus estrategias de negocio, gestión de riesgos, gobernanza y divulgación.
• El MUS llevará a cabo una prueba de resistencia climática y un examen temático para evaluar los avances de los bancos en la consecución de este objetivo. A su vez, los supervisores llevarán a cabo inspecciones in situ, se pondrán en contacto con las entidades que presenten deficiencias importantes en la gestión del riesgo climático y medioambiental para asegurarse de que aplican planes de acción correctores sólidos y vigilarán el cumplimiento de los próximos requisitos normativos.

2) Exposiciones al riesgo de crédito de contraparte, especialmente frente a entidades financieras no bancarias
• El BCE destaca que el entorno de bajos tipos de interés, y las estrategias de búsqueda de rentabilidad han incentivado a ciertos bancos a aumentar el volumen de servicios del mercado de capitales que prestan a contrapartes arriesgadas y menos transparentes, incluidas las entidades financieras no bancarias.
• El MUS realizará revisiones específicas e inspecciones in situ de la gobernanza y la gestión del riesgo de crédito de contraparte de los bancos.
• Los equipos conjuntos de supervisión exigirán a los bancos con deficiencias importantes que adopten medidas correctoras.

3) Deficiencias en la subcontratación de Tecnologías de la Información (TI) y en la resistencia cibernética
• La gestión inadecuada de los riesgos de externalización de TI por parte de los bancos supervisados, junto con su creciente dependencia de terceros proveedores de TI (incluidos los proveedores de servicios en la nube), suscitan inquietudes que justifican una mayor atención por parte de la supervisión.
• Los ciberataques han aumentado de 2020, y el MUS considera que ataques similares tienen el potencial de traducirse en pérdidas materiales en el futuro.
• Los supervisores llevarán a cabo una evaluación de los acuerdos de externalización de los bancos y exigirán a los bancos con deficiencias importantes que se gestionen esas relaciones.
• También se intensificarán progresivamente las actividades de supervisión que abordan las prácticas de gestión de riesgos de los bancos en estas áreas.