Avances y desafíos de la Facturación Electrónica en Panamá: Impulsando la Eficiencia Empresarial

En los últimos años, la facturación electrónica ha sido tema de discusión en Panamá, buscando potenciar la competitividad empresarial y mejorar la eficiencia en recaudación. La promulgación del Decreto Ejecutivo No.25 de 27 de junio de 2022, en consonancia con la Ley 76 de 1976, marcó un hito al establecer el marco normativo para la implementación de equipos fiscales autorizados y el Sistema de Facturación Electrónica en Panamá.

Eficiencia Empresarial

El objetivo principal de la Facturación Electrónica es agilizar los procesos contables y financieros, así como impulsar el comercio electrónico en el país. Aunque representa un avance significativo, el cambio de paradigma de lo analógico a lo digital presenta desafíos para las empresas panameñas.

Adopción y Avances

Según datos de la Dirección General de Ingresos (DGI), al cierre del 2023, aproximadamente 60 mil contribuyentes ya habían adoptado la facturación electrónica, lo que equivale al 28% de los declarantes activos. Esta cifra refleja un progreso considerable en implementación de esta tecnología.

Retos y Desafíos

No obstante, existen desafíos importantes que deben abordarse. Uno de ellos es la necesidad de educar a todos los contribuyentes sobre esta nueva modalidad electrónica, asegurando su comprensión y adopción adecuada. Además, la migración eficiente y práctica hacia la facturación electrónica sigue siendo un desafio clave para muchas empresas.

Beneficios y Perspectivas Futuras

A pesar de los desafíos, la facturación electrónica ofrece beneficios significativos, como la reducción de costos operativos, la mejora en la gestión de documentos y la optimización de los procesos contables. Se espera que, con el tiempo, más empresas se sumen a esta tendencia, fortaleciendo así la eficiencia empresarial en Panamá.

La implementación en la facturación electrónica en Panamá marca un paso importante hacia la modernización y la eficiencia en el ámbito empresarial. Si bien persisten retos, el compromiso conjunto de las empresas y las autoridades será la clave para superarlos y aprovechar al máximo los beneficios que esta tecnología ofrece.