Perspectivas

El posible impacto del Covid-19 en contratos de APP y prestación de servicios

Los retos que enfrentan los activos de infraestructura

En las últimas semanas, el brote del COVID-19 ha contribuido a que la demanda de servicios en todo el mundo se contraiga, debido a, entre otros factores, las medidas de distanciamiento social adoptadas por los sectores público, privado y social. Por esta razón, se espera una recesión pronunciada y una recuperación que se prolongue al mediano plazo y durante el resto del año 2020.

En este sentido, las empresas que participan en la prestación de servicios relacionadas con algún activo de infraestructura, bajo el marco de un contrato APP o de prestación de servicios, podrían verse afectadas, entre otros, por los siguientes factores: incremento en los costos de insumos y materiales (sobre todo los que estén denominados en dólares); variaciones significativas en la demanda de servicios hacia la baja o hacia el alza (esto último, en el caso de los hospitales), y aumento en los costos de financiamiento.

Si bien, en el corto plazo, las empresas privadas deberán buscar fuentes alternas de financiamiento y lograr eficiencias operativas y de costos para abatir la crisis, en el mediano plazo, podrían optar por estas alternativas en la medida en que los esquemas de contratación, ya sean de carácter económico-financiero o contractuales, se los permitan, y conforme a las cláusulas de caso fortuito o fuerza mayor.

En el documento completo presentamos algunos de los escenarios que pueden materializarse y tener un impacto significativo en la rentabilidad y/o en la operación de los servicios contratados bajo estos esquemas por el brote del COVID-19 en los sectores de transporte, salud, energía, y agua.

Acciones clave para gestionar la crisis
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