¿Cómo puede México repuntar en competitividad?

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¿Cómo puede México repuntar en competitividad?

Si nuestro país quiere subir de posiciones en el Índice Global de Competitividad, del Foro Económico Mundial, debe enfocar esfuerzos, principalmente, en rubros como la infraestructura, la estabilidad macroeconómica y la salud.

Ciudad de México, 25 de octubre de 2019.

La caída, este año, igual que en 2018, volvió a ser de dos posiciones. México retrocedió del lugar 46 al 48 en el Índice Global de Competitividad 2019 del Foro Económico Mundial (World Economic Forum), un reporte que evalúa al “conjunto de instituciones, políticas y factores que determinan el nivel de productividad de un país”.

¿De qué forma se hace esto? Mediante el análisis de 12 pilares dentro de cada economía: Instituciones, Infraestructura, Adopción de Tecnologías de la Información, Estabilidad Macroeconómica, Salud, Habilidades, Mercado de Productos, Mercado Laboral, Sistema Financiero, Tamaño de Mercado, Dinamismo de Negocios y Capacidad de Innovación.

Aquellos rubros en los que México bajó de calificación fueron: Infraestructura, al pasar de 72.9, en 2018, a 72.4, en 2019, en una escala del 0 al 100; Estabilidad Macroeconómica, de 99.4 a 97.8, y en Salud, de 84.6 a 82.

En lo que respecta a Infraestructura, la baja se puede atribuir principalmente a la caída del gasto público y de las inversiones en diferentes industrias, el año pasado. En ese sentido, para mejorar en este pilar, es necesario impulsar el desarrollo de obras y delinear, lo antes posible, los ejes que reactiven a los sectores estancados.

En cuanto al pilar de Estabilidad Macroeconómica, el Foro Económico Mundial señala que nuestro país se vio afectado por el aumento de la inflación en 2018, así como por el incremento que registró la deuda pública.

En ese sentido, en días recientes, el Fondo Monetario Internacional (FMI) hizo a México diversas recomendaciones en la materia, como impulsar un sistema fiscal inclusivo, que favorezca el crecimiento y reduzca la deuda pública, así como implementar una política monetaria más laxa1.

En el tema de Salud, las evaluaciones del índice bajaron debido a una reducción en la esperanza de vida, al pasar, según el Foro, de 67.1 a 66.2 años de vida. De acuerdo con el Inegi, una esperanza de vida alta indica un mejor desarrollo económico y social en la población, por lo que, una reducción de este indicador refleja, al mismo tiempo, problemas económico-sociales.

De igual forma, nuestro país presenta rezagos importantes en seguridad y transparencia, que forman parte del pilar de Instituciones –mismo que, de forma paradójica, consiguió una mejor evaluación que en 2018–, cayendo del sitio 127 al 138 y del 113 al 116, respectivamente, dentro del ranking.

En torno a esta situación, diversos organismos internacionales han propuesto al gobierno mexicano algunas estrategias para avanzar en cuestiones de seguridad e impartición de justicia. Hace unos días, por ejemplo, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito en México propuso incluir la mediación penal (con la participación de terceros imparciales) para garantizar el Estado de Derecho y el acceso a la justicia2.

Todos estos temas se presentan, por lo tanto, como materias pendientes para nuestro país, temas en los que las autoridades deberán trabajar para obtener mejores resultados, sin descuidar, por ello, el resto de los pilares que conforman y sobre los que se evalúa la competitividad.

1. https://www.imf.org/en/News/Articles/2019/10/11/mcs101119-mexico-staff-concluding-statement-of-the-2019-article-iv-mission

2. https://www.unodc.org/mexicoandcentralamerica/es/webstories/2019/UNODC_Penal.html

El Fondo Monetario Internacional hizo a México diversas recomendaciones como impulsar un sistema fiscal inclusivo que favorezca el crecimiento y reduzca la deuda pública.

Los avances

En el ranking global de competitividad, México aparece muy lejos de las calificaciones obtenidas por países como Singapur (en el primer lugar, con 84.8 puntos), seguido de los Estados Unidos, Hong Kong, Países Bajos, Suiza, Japón, Alemania, Suecia, Reino Unido y Dinamarca.

Sin embargo, a nivel regional, en América Latina, se posicionó como la segunda economía más competitiva, después de Chile (que ocupa el lugar 33 mundial, con una calificación de 70.5). De este modo, México logró avanzar dos sitios en esta categoría.

En contraste con los pilares donde bajaron sus calificaciones, tuvo mejoras en los rubros de Instituciones, donde pasó de 47.7 puntos, en 2018, a 48.3, en 2019; en Adopción de Tecnologías, de 51.3 a 55; Habilidades, de 57.9 a 58.3; Mercado de Productos, de 57.5 a 57.7; Mercado Laboral, de 54.4 a 55.8; de Sistema Financiero, de 60.8 a 61.8; Tamaño de Mercado, de 80.6 a 80.8; Dinamismo de Negocios, de 65.5 a 65.8, y Capacidad de Innovación, de 42.7 a 43.6.

Históricamente, las principales fortalezas de la productividad mexicana se han basado en su gran estabilidad macroeconómica y en el amplio tamaño del mercado nacional, ya que es una de las economías más grandes del mundo en términos de producción, comercio y población, de acuerdo con los informes del Foro Económico.

No obstante, el reporte publicado este año señala que “la incertidumbre y las tensiones comerciales derivadas de la política comercial internacional de los Estados Unidos constituyen un obstáculo que impide el desarrollo socioeconómico de México, reduciendo las expectativas de los líderes empresariales y, en consecuencia, su disposición a invertir”.

El Foro también señala que la economía mundial vive un periodo de bajo crecimiento, y que, aun cuando los pronósticos consideran poco probable que exista una desaceleración tan grave como la recesión de 2008-2009, la política monetaria puede “haberse quedado sin vapor”.

Adicional a lo anterior, “el contexto geopolítico es más desafiante que en 2007, con estancamiento en la gobernanza internacional y la intensificación de las tensiones comerciales y políticas que alimentan la incertidumbre, que frenan las inversiones y aumentan el riesgo de choques de oferta”.

Por ello es crucial, señala el informe, “construir una resistencia económica a través de la mejora de la competitividad, especialmente para países de bajos ingresos”.

El Índice Global de Competitividad del Foro Económico Mundial se publica cada año desde 1979; su objetivo es ayudar a los gobiernos, al sector privado y a la sociedad civil a impulsar la productividad y generar prosperidad entre las naciones.

En América Latina, México se posicionó como la segunda economía más competitiva, después de Chile.

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