Nuevo código de ética empresarial

Perspectivas

Los retos del nuevo Código de Integridad y Ética empresarial

Desde inicios de octubre de este año, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) tiene un nuevo Código de Integridad y Ética, que surge en respuesta al nuevo régimen de responsabilidades legales con el que deben cumplir las empresas, aunado al reclamo por mayor transparencia y rendición de cuentas.

Renovar los estatutos y principios de este documento –cuya primera edición se publicó en 2015–, más que necesario, era un deber por parte del organismo empresarial mexicano, que con esta actualización se suma a los esfuerzos que han surgido para fomentar la transparencia en el país, como el Sistema Nacional Anticorrupción.

En entrevista con Juan Manuel Torres, Socio Líder Asesoría en Ética Empresarial en Deloitte México.

Ciudad de México, 6 de noviembre de 2017.

Si bien se trata de un esfuerzo positivo e inclusivo, para cuya creación se tomaron en cuenta los puntos de vista de diversos órganos como Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, tres Colegios Nacionales de Abogados, así como del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, su puesta en marcha implica diversos retos para las empresas.

En primer lugar, se debe tener claro que no se trata de una obligación, sino una opción a la que las compañías pueden adherirse. En ese sentido, el reto inicial es el tiempo, y es que el CCE estableció dos fechas límite para quienes estén interesados en adoptar este código.

Una vez que las empresas envían al organismo su carta compromiso de adhesión a los principios del nuevo Código de Integridad y Ética Empresarial tienen, si son grandes corporativos, seis meses, o bien, si se trata de pequeñas y medianas empresas, un año para cumplir con él.

En realidad, se trata de lapsos muy cortos para cumplir con todos los requerimientos que conlleva la adopción de los nuevos principios establecidos, en su mayoría, procesos complejos que en algunas ocasiones implican un trabajo de más de seis meses o un año.

Ejemplo de esos procesos es el Reporte General de Cumplimiento emitido por un despacho de auditores externos y que deberá de ser firmado de conocimiento por el Administrador único, Director General, Comité Ejecutivo, Comité de Auditoria, Oficial de Cumplimiento u órgano similar, un procedimiento que además de tiempo, compromete nuevos costos que tal vez las compañías no tienen contemplados.

Por esta y otras razones es que muchas compañías se encuentran actualmente realizando una evaluación de si se adhieren o no al nuevo Código de Integridad y Ética Empresarial, quizá muchas de ellas adopten paulatinamente estos principios como una mejor práctica, para luego firmar la carta compromiso de adhesión.

El adherirse a este nuevo código implica, para las compañías, la creación y documentación de diversos procesos que conllevan plazos y costos que quizá no tenían contemplados.

Los beneficios

Los beneficios de que las compañías se adhieran a los principios establecidos en el nuevo Código de Integridad y Ética Empresarial son, principalmente, dos.

El primero es un beneficio interno, pues ayuda a promover los valores de la organización dentro de ella y a formar a los empleados de la empresa en cuestiones anticorrupción. De igual forma, permite mejorar procesos, políticas y abrir canales de comunicación.

Esto se puede ver reflejado en mejores resultados en las encuestas de ambiente laboral, así como en la rápida y certera identificación y detección de prácticas indebidas o cuestiones relacionadas con la falta de transparencia y corrupción.

El otro beneficio, y el que nosotros desde el punto de vista de asesoría pensamos tiene mayor impacto, es el externo, es decir, el beneficio de que tu cliente o tu proveedor o la sociedad incluso te identifique como una Compañía Ética.

Este beneficio se verá acompañado con el reconocimiento que en su momento haga el CCE de las compañías que se adhirieron y cumplieron con el nuevo código de integridad y ética, lo que abonará a la promoción pública de la ética de la empresa.

La importancia de la denuncia

El Principio #9 establecido en el nuevo Código de Integridad y Ética Empresarial indica que las empresas deben de contar con sistemas de denuncia y confiabilidad.

En ese sentido, el Consejo Coordinador Empresarial recomienda que esa línea de denuncia esté administrada proveedor independiente, sin embargo, también brinda la opción de que se realice de manera interna.

Nuestra experiencia profesional en temas de anti corrupción y transparencia nos permite concluir que cuando una empresa maneja su línea de denuncia internamente se vuelve, en automático, juez y parte. Por ello nuestra recomendación es adoptar herramientas como Tips Anónimos-Sistema Integral de Ética de Deloitte.

Finalmente, invitamos a las compañías a hacer un esfuerzo para adoptar el Código de Integridad y Ética Empresarial del CCE, pues “todos debemos de ser parte de esta lucha contra la corrupción”.

Todos    debemos de ser parte de esta lucha contra la corrupción.

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