Análisis Costo-Beneficio Ha sido salvado
Servicios
Análisis Costo-Beneficio
Una herramienta de toma de decisiones
Una herramienta de toma de decisiones utilizada para analizar los beneficios económicos netos de un proyecto, política o inversión o para elegir entre distintas iniciativas. Análisis y clasificación de proyectos basados en valores económicos, sociales y ambientales, así como análisis de eficacia y eficiencia.
El análisis de costo-beneficio ha sido la principal metodología para evaluar inversiones y analizar políticas que normalmente están sujetas a recursos y restricciones presupuestarias limitadas. Gracias a este proceso, los responsables de llevar a delante proyectos de inversión de una empresa o quienes diseñan políticas públicas podrán evaluar y cuantificar de manera metódica y sistemática si un proyecto propuesto es rentable y compararlo con las alternativas posibles. A partir del uso de un marco analítico económico, ayudamos a los clientes a impulsar la eficiencia en la asignación de recursos y a llegar a la mejor decisión de inversión posible.
Nuestros profesionales están capacitados para aplicar este enfoque a una amplia gama de áreas temáticas, que incluyen el sector Agropecuario, Automotriz, Construcción, Consumo, Energía, Minería, Transporte, Financiero, Políticas públicas, Salud, Telecomunicaciones y Turismo, entre otras.
Podemos ayudarlo a:
- Asignar mejor sus recursos y seleccionar proyectos que ayuden a maximizar los beneficios potenciales
- Analizar la contribución del proyecto al bienestar económico de una región o país, incluidos los impactos sociales y ambientales.
- Analizar la eficiencia y eficacia de herramientas alternativas de ingresos e iniciativas de pricing.
- Priorizar proyectos en función de los beneficios económicos netos que genera cada proyecto.
Nuestra metodología de trabajo incluye los siguientes pasos a seguir:
- Establecer el marco conceptual: definir el alcance, los objetivos y el contexto del proyecto, junto con la identificación de posibles opciones disponibles.
- Reconocer y clasificar los beneficios: identificar los impactos y repercusiones vinculados al proyecto, categorizando los costos y beneficios como directos, indirectos, tangibles y cuantificables.
- Cuantificar y medir los impactos: siempre que sea posible, asignar un valor monetario a cada impacto evaluado, descontando costos y beneficios futuros a valores actuales netos y calculando la tasa interna de rendimiento económico.
- Llevar a cabo un análisis de sensibilidad: identificar las principales áreas de incertidumbre y riesgo, y realizar un análisis para comprender las posibles consecuencias de escenarios alternativos en los costos y beneficios proyectados.
- Exponer los resultados y recomendaciones: comunicar los descubrimientos para ilustrar las ventajas y desventajas de la inversión o proyecto planificado en términos de costos y beneficios.