Deloitte en la prensa
El desafío de los auditores internos: estar actualizados
Hacer Empresa | 28 de febrero de 2025
En un mundo empresarial en constante evolución, la capacitación continua de los auditores internos se convirtió en una necesidad imperativa. En Uruguay, este aspecto cobra especial relevancia por el creciente dinamismo del entorno económico y regulatorio. En este sentido, las organizaciones reconocen cada vez más la necesidad de invertir en la formación y el desarrollo continuo de sus auditores internos.
El rol del auditor interno evolucionó significativamente en las últimas décadas. Ya no se limita únicamente a la identificación de irregularidades y a la verificación de cumplimiento normativo. Hoy en día debe poseer habilidades analíticas avanzadas, un profundo entendimiento de los riesgos y controles, así como la capacidad de asesorar a la alta dirección sobre mejores prácticas y estrategias para la mitigación de riesgos.
El entorno empresarial y regulatorio en Uruguay, al igual que en el resto del mundo, está en constante cambio. La actualización de las normas globales de auditoría interna, la digitalización y las exigencias de transparencia son solo algunos de los factores que obligan a los auditores internos a actualizar constantemente sus conocimientos y habilidades. La capacitación continua permite que se adapten rápidamente a las nuevas realidades, asegurando que las auditorías se realicen con el mayor nivel de precisión y relevancia. También promueve el desarrollo de habilidades analíticas y de resolución de problemas, fundamentales para enfrentar situaciones complejas. Esto no solo beneficia al auditor interno, sino también a la organización en su conjunto. Un auditor bien formado es capaz de identificar con mayor precisión los riesgos y las áreas de mejora, lo que se traduce en auditorías más eficientes y efectivas.
El rol del auditor interno evolucionó significativamente. Ya no se limita a la identificación de irregularidades y a la verificación de cumplimiento normativo.
La revolución tecnológica transformó todas las áreas del negocio, y la auditoría interna no es una excepción. Herramientas de análisis de datos, inteligencia artificial (IA) y automatización están redefiniendo la forma en que se llevan a cabo las auditorías. La capacitación en estas tecnologías emergentes no solo es una ventaja competitiva, sino una necesidad para mantener la relevancia y la eficacia del auditor interno en este nuevo contexto.
Al invertir en el desarrollo profesional de sus empleados, las empresas envían un mensaje claro: la calidad y la excelencia son importantes. Esta cultura de aprendizaje y desarrollo constante no solo mejora la moral y la motivación del personal, sino que también contribuye a la sostenibilidad y éxito a largo plazo de la organización.
Existen diversas modalidades de capacitación que las organizaciones pueden implementar para desarrollar las competencias de sus auditores internos. Las más efectivas son cursos, talleres, seminarios y certificaciones profesionales. Respecto a estas últimas, las más reconocidas en la materia son el Certified Internal Auditor (CIA) y el Certified Information Systems Auditor (CISA). Otra modalidad muy efectiva es el entrenamiento en el trabajo (on-the-job training), dado que permite a los profesionales aprender y desarrollar habilidades en un entorno real y práctico, recibir retroalimentación directa y aplicar inmediatamente lo aprendido.
Por otra parte, las mentorías y el coaching son herramientas poderosas para el desarrollo profesional. Un auditor experimentado puede actuar como mentor, proporcionando orientación, compartiendo experiencias y ayudando a sus colegas con menor experiencia a navegar desafíos específicos de la profesión. El coaching, por otro lado, se centra en el desarrollo de habilidades y en la mejora del rendimiento a través de sesiones estructuradas y personalizadas. Al implementar una combinación de modalidades de capacitación, las empresas pueden asegurarse de que sus auditores internos estén bien preparados para enfrentar los desafíos actuales y futuros.
Uno de estos grandes desafíos es la transformación significativa que están experimentando los negocios y, por ende, las auditorias gracias a la adopción de nuevas tecnologías, especialmente la IA.
Uno de estos grandes desafíos es la transformación que están experimentando las auditorias gracias a la adopción de nuevas tecnologías, especialmente la IA.
Algunos casos en los que la IA está agregando valor a la auditoría interna son el análisis de datos y la detección de anomalías. Esto nos permite analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real e identificar patrones y anomalías que podrían indicar fraudes o errores. Por ejemplo, mediante el uso de algoritmos de machine learning, los sistemas de IA pueden detectar transacciones inusuales que podrían pasar desapercibidas en una revisión manual. También aportan valor en la automatización de tareas rutinarias y repetitivas, reduciendo tiempos y minimizando el riesgo de errores humanos en la evaluación de riesgos en tiempo real (como puede ser el monitoreo de operaciones financieras para alertar a los auditores sobre posibles riesgos antes de que se conviertan en problemas significativos).
Estas innovaciones están revolucionando la manera en que los profesionales realizan su trabajo, mejorando la eficiencia, la precisión y la capacidad de identificar riesgos. A pesar de los beneficios, la adopción de nuevas tecnologías también presenta varios desafíos: la actualización de conocimientos y habilidades que ya comentamos; la resistencia al cambio, especialmente aquellos que están acostumbrados a métodos tradicionales; la privacidad y seguridad de los datos; y la integración con sistemas existentes, para lo cual es necesario un enfoque bien planificado que asegure que las nuevas herramientas se integran sin problemas y mejoran la eficiencia general.
Mediante el uso de algoritmos de machine learning, los sistemas de IA pueden detectar transacciones inusuales que podrían pasar desapercibidas en una revisión manual.
La capacitación continua de los auditores internos es una inversión estratégica que ofrece múltiples beneficios tanto para los profesionales como para las organizaciones. En un entorno empresarial caracterizado por cambios rápidos y constantes, mantenerse actualizado y adaptable es crucial. Las instancias de capacitación no solo mejoran la calidad y eficiencia de las auditorías, sino que también aseguran el cumplimiento normativo, la incorporación de nuevas tecnologías e impulsan una cultura de mejora continua. Por todas estas razones, es sustancial que las empresas uruguayas e instituciones públicas prioricen y promuevan el aprendizaje continuo de sus auditores internos, garantizando así un futuro sólido y sostenible. Las nuevas tecnologías, en especial la IA, están transformando las auditorías internas, ofreciendo nuevas oportunidades para mejorar la eficiencia y la precisión. Sin embargo, para aprovechar plenamente estos beneficios, es fundamental abordar los desafíos asociados con su adopción y asegurarse de que los profesionales estén bien preparados para operar en un entorno digital en constante evolución.