Las Finanzas en el mundo digital | El CFO hoy más que nunca asesor y socio de negocios

Recientemente en Deloitte publicamos la 5ta. edición de la serie Crunch Time, en esta oportunidad para discutir cómo vemos a las áreas de Finanzas en el 2025. Pero, más allá del año, se plantean una serie de nuevos paradigmas sobre los que se están construyendo las áreas financieras modernas.

En Finance 2025 se analizan algunos aspectos que hoy ya forman parte de las finanzas pero con foco en una visión de total integración y desarrollo: analytics, big data, automatización robótica, inteligencia artificial, blockchain, cloud, entre otros ya operando a capacidad completa.

Entonces, ¿qué queda? 

El desafío, tal como se plantea en el video, consiste en retomar un rol de asesor y socio de negocios que no tiene por qué haberse perdido, pero que en muchas organizaciones fue olvidado o relegado por las necesidad inmediatas del CFO y sus equipos de enfocarse en muchas tareas operativas, regulatorias y de controles. Con el paso de los año, dichas tareas lo hicieron centrase en la eficiencia, en el nivel de transaccionalidad, en el cumplimiento de los plazos, en la emisión de reportes, etc.

Ahora gracias a las ventajas de la transformación digital, el CFO tiene la oportunidad de focalizarse en ser un real asesor y socio de negocios para las restantes áreas de la compañía.

El desafío es procesar un cambio en el modelo de operación actual, muchas veces intensivo en horas, enfocado en la transacción, en los cierres y en el reporting. El objetivo es dar paso a una nueva realidad, con personas menos enfocadas en las transacciones y mucho más enfocadas en generar conclusiones, proyectar el negocio, asesorar sobre nuevas oportunidades, entre otras cosas.

 ¿Cómo nos preparamos para ello? Como decía al principio, más allá del año 2025 o 2024 o 2026, la transformación ya está ocurriendo y en nuestra opinión hay 5 acciones clave a realizar:

1. Entender la tecnología 

Todos los conceptos tecnológicos que mencionamos antes, llegaron para quedarse, no hay retorno. Si no tratamos de entender la tecnología actual y futura, estás condenando a tu área al primer escenario del video que mencionamos al principio. Hay que hacer el esfuerzo, abrir la mente, investigar. En este desafío, el CIO puede ser un excelente aliado para entender el terreno y ayudar en lo que sigue.

2. Definir una visión ambiciosa

Vale la pena tomarse una pausa, reunirse con el equipo y definir: ¿cuál es nuestra aspiración como área de Finanzas? ¿Qué queremos de nosotros mismos? ¿Cuál es nuestro compromiso? Seamos ambiciosos, porque las posibilidades son muchas. Ya no es cuestión de bajar de 4 días a 3 días el reporte mensual, sino de pensar qué necesitamos para el real-time. Incorporemos nuevos talentos, nuevas capacidades que nos ayuden a obtener nuevos resultados.

3. Elegir la velocidad de los cambios

Podemos (y debemos) ser ambiciosos, ahora con qué velocidad iremos transformando el área depende de nosotros mismos, dando los pasos que estimemos convenientes. Eso sí, la comunicación clara y confiable es fundamental en el proceso, al igual que una estrategia definida. Lo peor que podemos hacer es que otros nos fijen la velocidad. 

4. Probar

Es muy difícil lograr una transformación inmediata. Los grandes cambios tecnológicos generan resistencia, dificultades y miedos (muchas veces justificados). Por ello aprovechemos la potencialidad de las nuevas tecnologías y probemos, probemos, probemos, para ir generando una transformación con pasos firmes. 

5. Generar impactos rápidamente

Apliquemos un enfoque ágil, iterativo, de mejoras sucesivas, hay que moverse y hacerlo rápido, porque como dijimos antes, es recomendable que uno fije el tiempo y la velocidad. Si no lo hace, seguramente otros lo hagan primero. En este sentido, es importante adelantarse a los cambios, a las necesidades del resto de la empresa, generar impactos que demuestren que la transformación digital no es un lindo enunciado, sino que realmente transforma la forma en cómo se trabaja. De esta forma nos aseguramos de no perder espacios que luego son difíciles de recuperar. 

En definitiva, para procesar esta transformación en las áreas de finanzas , la recomendación para el CFO es definir una estrategia clara, comunicarla al resto del equipo de forma eficiente, entender la tecnología, pensar en grande, actuar con pequeños pasos firmes y hacerlo rápido. De esta forma, si bien no podemos asegurar el éxito, seguramente iremos bien encaminados hacia el segundo escenario del video y lograremos sacarle el jugo a las Finanzas en el Mundo Digital.